Por Enrique Cruz

Hace más de una década, una colega y amiga mía, me regaló un libro titulado: Maestría Personal, el camino del liderazgo, escrito por Oscar Anzorena.

La lectura de este libro ha impactado favorablemente en mi desarrollo profesional.

Oscar Anzorena parte de una visión integradora y holística del ser humano. 

Él propone que la maestría personal está integrada por cinco competencias básicas, que son:

• Visión personal
• Fortaleza emocional
• Capacidad de aprendizaje y cambio
• Competencias conversacionales 
• Efectividad interpersonal.

La visión personal, indica Anzorena, está asociada al sentido y propósito  en nuestra vida, lo cual aporta dirección a la misma. En ello influyen los valores, los intereses y aspiraciones personales.

Por otro lado, Anzorena reconoce que la emocionalidad que nos embarga en un momento dado es fundamental, pues condicionará nuestro desempeño. Así, la fortaleza emocional, indica el autor, está ligada al conocimiento y gestión de nuestras emociones.

La capacidad de aprendizaje y cambio, indica Anzorena, es fundamental para enfrentarse con éxito a los cambios laborales y sociales que vivimos continuamente. Aquí, señala el autor, la capacidad de aprender a aprender es fundamental debido, entre otros aspectos, a la obsolescencia del conocimiento.

Las competencias conversacionales son fundamentales para cualquier tarea. Ya que, por ejemplo, indica Anzorena, la efectividad personal y la productividad de cualquier organización estará estrechamente ligada a dichas competencias. 

La efectividad interpersonal, señala el autor del libro, estará impactando en cualquier actividad que emprendamos en equipo, pues estaremos coordinando acciones con otros, lo que implicará acuerdos, compromisos y gestión de conflictos entre otros aspectos.

Considero que la lectura de este libro puede ayudar a cualquier persona a tomar consciencia de la importancia de estas cinco competencias para el desarrollo personal y del liderazgo, ya que este último es un proceso que ocurre dentro de un grupo y está asociado al logro de objetivos o metas, para lo cual debe desarrollar la capacidad de influenciar a otros, lo cual conlleva el uso de valores.

Por otro lado, señalan Hughes, Ginett y Curphy, que las personas difieren en muchos aspectos, destacando entre ellos: pensamientos y sentimientos, esperanzas y sueños, necesidades y temores, metas y ambiciones así como fortalezas y debilidades. Lo anterior nos recuerda que el liderazgo es un verdadero reto, pues exige el conocimiento profundo del otro.

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Referencias:

• Anzorena 0.  (2008). Maestría Personal, el camino del liderazgo. Argentina. Ediciones Lea.
• Hughes R., Ginnett R. & Curphy G.  (2006).  Leadership, Enhancing the Lessons of the Experience. Singapore: Mc Graw Hill.